El sabor que caracteriza Menorca
Menorca fue proclamada Región Europea de Gastronomía 2022 por el Instituto Internacional de la Gastronomía, la Cultura, las Artes y el Turismo (IGCAT). Con esta distinción, se reconocen los valores de la cultura gastronómica de la isla al tiempo que pretende ser un estímulo para empoderar a la comunidad local sobre la importancia de salvaguardar y promover sus recursos alimentarios, culturales, artísticos y de turismo sostenible.
Menorca está en el punto de mira de la gastronomía en mayúsculas. La proliferación de nombres de alta cocina en la isla, junto con la combinación de un producto fresco, de temporada y de kilómetro cero que ya es imprescindible en muchos fogones, han hecho de Menorca un destino gastronómico. Durante el año se organizan diversos eventos relacionados con los diferentes productos que salen del campo y el mar, directos al paladar. Y el gusto por la cocina de siempre y la recuperación de recetas ancestrales solo añade un bagaje culinario ya existente cuando el michelín aún no se asociaba a las estrellas de calidad de un restaurante.
El año de despegue para la cocina isleña será en 2022. Declarada como Región Gastronómica Europea, Menorca se erige como uno de los puntos más vanguardistas del panorama culinario. Sin olvidar las raíces que caracterizan la cocina menorquina.
La base de la buena cocina
Toda buena cocina que se precie tiene solo dos ingredientes imprescindibles: buenas manos y buen producto. Y de lo segundo -aunque también de lo primero- Menorca está a rebosar. Ya sea la carne de los animales de raza autóctona, las hortalizas cultivadas y recogidas en temporada o las capturas de las barcas los días de faena, las cocinas se llenan con una calidad suprema.