Conocer Menorca en kayak te entusiasmará

Surcar las transparentes aguas azules remando con tranquilidad. Aquí una cueva, allí una pequeña cala desierta de arena blanca,... navegando en kayak descubrimos el paraíso.

Menorca es un lugar perfecto para disfrutar a bordo de un kayak. ¿Lo has probado? Nosotros nos hemos animado este año. Mis hijos están entusiasmados. Para ellos es una aventura. Ayer el monitor nos dio unas cuantas instrucciones básicas e hicimos una pequeña travesía por la bahía de Fornells.

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Hoy salimos los cuatro solos. Dos kayaks para dos personas, unos bocadillos, agua, crema para el sol, gorras y el chaleco salvavidas bien colocado. Nos ponemos en marcha temprano en un día de sol y calma chicha.

A nuestro lado un grupo de amigos ríen ante la torpeza de uno de ellos a subir en su kayak. Se preparan para ir hasta la playa de Cavallería. Es un recorrido demasiado largo para nosotros que somos novatos.

Calas y acantilados

Nos cuentan que ayer partieron de Cala Galdana y navegaron hasta Santo Tomás. Dicen que el mar estaba tan claro que podían ver el fondo arenoso. Conocieron las calas vírgenes de Mitjana, Mitjaneta, Escorxada ,… no paraban de hablar con un entusiasmo contagioso.

Nos despedimos. Ellos salen rápido pero nosotros nos lo tomamos con calma. Damos un pequeño paseo en kayak por la bahía y descubrimos algunas pequeñísimas calas. Martín, el mayor, ha traído su cámara de fotos, y deja constancia de cada uno de los “tesoros” que encuentra: una barca donde un pescador prepara las cañas, unos peces que se acercan a nuestras embarcaciones,… ¡A remar!, le dice su padre.

Cuevas misteriosas

Vamos hacia la bocana del puerto de Fornells. Nos han hablado de la Cova dels Anglesos y queremos visitarla. Navegamos cerca de los acantilados. Clara, la pequeña, no quiere separarse mucho de la costa. El paisaje es increíble. Las rocas tienen una gran variedad de tonos rojizos, formas caprichosas y muchos recovecos.

Con las indicaciones del monitor hemos llegado fácilmente a la cueva. La leyenda cuenta que se llama así porque unos exploradores ingleses entraron en ella para investigarla y nunca se les volvió a ver. Martín nos sorprende: ¡trae una linterna en su mochila!. Podemos ver la entrada a varias galerías pero puede ser peligroso entrar en ellas sin conocer el camino.

Volvemos hacia la bocana de la bahía. Antes hemos visto una cala donde pararemos para darnos un chapuzón y comer un bocadillo. El sol comienza a picar y los niños necesitan descansar un rato.

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Fornells, un pueblo de cuento

Hemos nadado un buen rato. El agua fresca y limpia nos ha dado nuevas energías así que comemos unos bocadillos y volvemos a los kayaks. Cruzamos la bahía. Vemos en lo alto la Torre de Fornells y, desde aquí, el pueblo parece de cuento: con sus casas, los barcos, los árboles del paseo,… ¡es precioso!

Poco a poco hemos llegado a nuestro destino. Ha sido un día estupendo y Martín ya nos ha convencido para que mañana salgamos desde Es Grau y hagamos una excursión hasta el Faro de Favàritx pasando por la Illa den Colom. ¡Genial! Ya hemos empezado a prepararlo todo.

Cuando caminábamos hacia el hotel nos hemos encontrado con el grupo de amigos que esta mañana salían hacia Cavalleria. Se les ve cara de cansados pero nos cuentan, felices, que el viaje ha sido fantástico, que han nadado en una espectacular calita de arena roja, que han visto altos acantilados y han llegado hasta una pequeña isla, Illa dels Porros, justo al lado del faro,….. Martín les mira con la boca abierta cuando cuentan sus aventuras.

¿Has vivido la experiencia de navegar en kayak por la costa de Menorca? Te sientes hermanado con la naturaleza y el silencio del mar te parece la mejor melodía. ¿Quieres apuntarte a una excursión? El norte y el sur te ofrecen diferentes paisajes y ambos te llenarán de vida. Te esperamos.

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